A veces dudo de quien inoculó el veneno quizás fui yo y no lo recuerdo o alguno de vosotros en secreto riguroso o todos inconscientemente emponzoñados de envidia o puede que viniera implícito en nuestra arquitectura genética activándose con el tiempo o nos lo endosara alguna bruja incorporada de lo que no dudo es de su extrema calidad y de sus efectos devastadores.