“El enjambre algún día con
dulcedumbre quedará” 


Mi piel es dulce Cuando los rayos del sol la acarician mi rincón guarda cada amanecer. Cuando escucha a las almas en llamas las protege como las abejas en su panal.


Mi piel es dulce desgastada por el avance de la sustancia. Y así almibarada busco los porque y los reclamos y así almibarada encuentro en los sigilosos perfiles el pedido desesperado. Y doy quitándome.


En mis manos quizá creada para esto Abrazarte en tus largos años en tus pocos soles o en la distancia. Y continúo este viaje observando al firmamento constelado buscando la estrella que me haga brillar. Me iré cristalizado lo sé.


No todo ese dulce permanecerá fluido pero persigo mi utopia deseando que mi cansado cuerpo se una con mi alma para darle a tu cielo otra luz que sé brillará y para siempre.

Con todo mi dulce afecto