¿Qué es una buena vida?
Publicado por Patricio Varsariah el martes, julio 29, 2025

Solo hay un éxito: poder vivir la vida a tu manera. Pero «la buena vida es una vida complicada. Para todos. La buena vida es alegre… y desafiante. Llena de amor, pero también de dolor. Y nunca ocurre
estrictamente; en cambio, la buena vida se desarrolla a lo largo del tiempo. Es un proceso. Incluye agitación, calma, ligereza, cargas, luchas, logros, reveses, avances y caídas terribles. He dedicado mucho tiempo a aprender sobre qué constituye una vida buena. La respuesta a la que siempre vuelvo es libertad más propósito.
Eso es todo.
Solo esas dos cosas marcan una gran diferencia. Libertad significa controlar tu tiempo, energía y decisiones. Es poder decir: "Quiero hacer esto" y realmente hacerlo. Eso puede ser dejar cosas que no te gustan, empezar cualquier cosa que desees, ir a los lugares que siempre has querido ver o simplemente pasar las mañanas tranquilamente.
La libertad de tiempo significa mucho para mí. La protejo como si mi vida dependiera de ello. He descubierto que las personas son más felices cuando se sienten autónomas. Sin libertad, la vida se siente como una trampa. Te mueves, pero no vas a ningún lugar que realmente desees. Es el oxígeno de tu alma. Luego está el propósito.
El arma más poderosa es tu alma llena de propósito, junto con la libertad de actuar en consecuencia. El propósito le da dirección a la libertad. Si la libertad es el motor, el propósito es el mapa. Es lo que te impide desperdiciar tu libertad en cosas que no importan. Cosas que alimentan tu alma. Quienes tienen un porqué para vivir pueden soportar casi cualquier cómo.
El propósito hace que lo difícil sea más llevadero. No te importa la lucha si sabes que te lleva a algo significativo. Y no tiene por qué ser algo grande. Puede ser criar buenos hijos. Construir algo que te importe. Ayudar a la gente. Crear arte. Aprender. Enseñar lo que sabes. O simplemente evolucionar en la dirección que te hace sentir vivo. El propósito de la vida no es ser feliz. Es ser útil, ser honorable... que el hecho de haber vivido y vivido bien marque la diferencia.
La libertad sin propósito es vacía. El propósito sin libertad se siente como un confinamiento. Necesitas ambos. Juntos, crean bienestar y felicidad duradera. No solo placer, sino significado. El fin último de los actos humanos es un estado de florecimiento humano, bienestar, o vivir una vida plena y significativa, más allá de la mera felicidad o placer pasajero.
Es un objetivo a largo plazo que se alcanza a través del desarrollo de la virtud, la sabiduría práctica y la realización del potencial humano, la felicidad en el sentido de vivir bien, que todos los hombres desean; todos los actos no son más que diferentes medios elegidos para alcanzarla. Las personas que se sienten autónomas y con un propósito tienen mayor satisfacción vital que quienes solo tienen una de las dos.
Si tienes un trabajo que te da libertad (horario flexible, teletrabajo) pero no un propósito, con el tiempo te sentirás perdido. Si tienes una misión, pero no libertad (un trabajo que te controla el tiempo), te quemarás. Pero si puedes encontrar o construir un entorno que te brinde ambas cosas, estás en el camino hacia lo que yo llamaría una vida plena. No siempre es fácil. Pero es posible. Y vale la pena esforzarse por lograrlo. Solo necesitas inclinar las cosas.
La libertad no significa que tengas que renunciar a algo por completo. Lo mismo ocurre con el propósito. No tiene por qué ser una "vocación". Puedes encontrar tu propósito a través de la curiosidad, el servicio o la constancia. Sigue esas pistas. Te llevarán a un lugar real. Hay algunas trampas de las que debes cuidarte. Cosas que roban la libertad y entierran el propósito: perseguir las metas de otros o vivir la vida de otro. Optimizar demasiado la productividad. Haz de la vida una experiencia, no una lista de verificación. Y hay tantas expectativas, presiones y distracciones de las que debes cuidarte.
La libertad más el propósito son tu verdadero norte. No necesitas tenerlo todo resuelto. Pero si avanzas hacia una mayor libertad y un mayor propósito, una experiencia a la vez, obtendrás lo que mereces. O lo que deseas. Una vida plena.
Si algo te llevas de este escrito, que sea esto: la libertad y el propósito no son lujos. Son esenciales. Estás viviendo la vida bien si les haces espacio. Puedes empezar ahora mismo. Empieza con la libertad.
Elimina las obligaciones innecesarias. Reclama un poco más de libertad. Busca un propósito más profundo. Sigue adelante. Y haz más de lo que funciona. Prueba diferentes caminos hasta que algo funcione. Esto no es un truco. Es una mentalidad. Una dirección por la que puedes vivir.
Demasiada libertad sin propósito lleva al vacío. Demasiado propósito sin libertad lleva al agotamiento. El secreto de la felicidad es la libertad. El secreto de la libertad es la valentía. La valentía para perseguir ambas transforma vidas. La libertad te da espacio para ser. El propósito te da algo por lo que vivir. Combínalos y la vida se vuelve mucho más agradable. Una fórmula simple si logras acertar.
La libertad te da espacio para ser. El propósito te da algo por lo que vivir.
Mi gratitud por dedicar tu tiempo en leer.
Patricio Varsariah.