pequeños pasos
Publicado por Patricio Varsariah el viernes, julio 21, 2017

Hoy, vamos a cortar a la persecución ...
Lo que realmente necesitamos hacer es a menudo lo que más nos apetece evitar. Esta es una dura realidad. Pero ... Si no vamos por lo que queremos, nunca lo conseguiremos. Si no hacemos las preguntas correctas, siempre obtendremos las respuestas equivocadas. Si no damos un paso adelante, siempre vamos a estar en el mismo lugar.
La vida es un viaje compuesto de pequeños pasos. La clave es tomar estos pasos, todos los días. Ya lo sabemos esto, ¿verdad?..Sin embargo, ¿con qué frecuencia estamos atrapados en un ciclo de preocupación, miedo y otras formas de exceso de pensamiento? ¿Con qué frecuencia nos distraemos sin rumbo? ¿Y con qué frecuencia postergamos?
Después de trabajar constantemente en mis hábitos de la plenitud de la mente y de la gerencia del tiempo, he llegado a ser razonablemente proficiente en conseguir cosas hechas con la distracción mínima y la dilación..
Hoy, por ejemplo, escribí una entrada para mi pagina web de 2000 palabras, revisé y esta listo para publicar, además he estado respondiendo a comentarios y correos electrónicos de Docenas lectores, fui a ver al dentista para un arreglo, pasé una noche de poca calidad, y por supuesto ahora estoy escribiendo este correo electrónico que voy a publicar mañana por la mañana.
Puede parecer mucho, pero puedo hacerlo dando un paso a la vez, con presencia y concentración.
Dicho esto, sin embargo, voy a ser el primero en admitir que todavía lucho con algunos hábitos terribles que se escabullen en mi a veces y se ponen en el camino de mi eficacia (porque soy humano). Y hay un hábito particular que lucho constantemente es muy común entre amigos, familiares, conocidos por igual - esto es algo que todos hacemos que acaba desperdiciando nuestras vidas, un precioso momento a la vez.
La palabra "desperdicio" puede parecer excesivamente dramática, pero en realidad no. Después de pasar muchos años escribiendo y trabajando a través de mis propios asuntos personales, no hay duda de que en algún momento y de alguna manera muy popular e igual que todos, colectivamente desperdiciamos nuestras vidas, y como:
Desperdiciamos nuestras vidas por una falta de autodisciplina. La autodisciplina es una habilidad. Es la capacidad de enfocar y superar las distracciones. Implica actuar de acuerdo a lo que sabes que es correcto en lugar de cómo te sientes en el momento (tal vez cansado o perezoso). Normalmente requiere sacrificar el placer inmediato y la emoción para lo que más importa en la vida.
La falta de autodisciplina para la mayoría de nosotros es a menudo el resultado de una falta de enfoque. En otras palabras, nos decimos que vamos a trabajar en algo, pero entonces no lo hacemos. Cuando esto me sucede, en primer lugar, me perdono por haberme desordenado, y luego me esfuerzo por ser consciente de lo que realmente está pasando. ¿Estoy dilatando por alguna razón? ¿Estoy distraído? En vez de decirme que soy "malo" o "indisciplinado", trato de descubrir de manera productiva un problema más específico y solucionable, y luego tratarlo.
Pero… ¿Qué haces si tu vida está en completo desorden, casi no tienes autodisciplina ni rutinas consistentes, no puedes pegarte a nada, pospones constantemente y te sientes completamente fuera de control? ¿Cómo empiezas a construir un ritual saludable de autodisciplina cuando tienes tantos cambios que hacer?
Si usted no sabe por dónde empezar, permítanme sugerir que empiece simplemente lavando sus platos. Sí, me refiero literalmente a lavar los platos. Es sólo un pequeño paso adelante: Cuando usted come su cena, lave los platos y las cucharas. Cuando termine de beber su café de la mañana, enjuague la cafetera y su taza. No deje ningún plato sucio en el fregadero o en el mostrador para más tarde. Lavarlos inmediatamente.
Forme este ritual un plato a la vez, un día a la vez. Una vez que haga esto consistentemente por un par de semanas, puede empezar a asegurarse de que el fregadero ha sido limpiado también. Luego el mostrador. Luego ponga sus ropas donde pertenecen cuando las saca. Coma algunas verduras en la cena o en el almuerzo. Etcétera.
Haz uno de estos rituales a la vez, y empezarás a construir un ritual saludable de autodisciplina, y finalmente sabrás que eres capaz de hacer lo que debes hacer ... y terminar lo que empiezas y siempre con una sonrisa.
En este mundo de responsabilidades, la ansiedad se ha convertido en una verdadera epidemia. Ilustremos tu vida: pasas el día esperando que se haga la hora para salir del trabajo y desperdicias tus años esperando que llegue tu licencia. ¿Conclusión? Vives esperando. ¡Esto es escalofriante! Así que da un paso a la vez: disfruta de lo que tienes ahora. Sin camino, no hay metas.
Y por supuesto, si estás luchando con algo de esto, sé que no estás sola o solo. Muchos de nosotros estamos ahí contigo, trabajando duro para sentirnos mejor, pensar más claramente y recuperar nuestras vidas.