No estarás sola o solo.
Soy un soñador, el que siente en el alma que quiere creer que el mundo aún puede ser hermoso. Quiero crear y contribuir a un mundo en el que la gente haga una pausa y escuche a los demás. He visto con mis propios ojos cuántas personas sufren simplemente porque nadie tiene tiempo para preguntarles cómo están realmente. Todavía no tengo el plan completo, ni la respuesta, pero sé una cosa: algún día, habrá algo significativo para aquellos que sufren solos.
Escribirme ayuda a escucharme a mí mismo con mayor claridad. Me recuerda que la curación es posible, para mí y para los demás. No solo escribo para expresarme. Escribo para sanar. Escribo para ser esa voz tranquila para otra persona, la voz que dice: "Estoy aquí. Estoy escuchando. No estás solo".
Intento a través de mis escritos será una luz diferente al mundo, basada en la reflexión, la presencia y la intención.
Si has llegado hasta aquí, gracias desde el fondo de mi corazón. Realmente desearía que encontraras algo aquí que se sintiera como un pequeño abrazo: cálido, familiar, tal vez incluso curativo. Y si no hoy, tal vez algún día, justo cuando más lo necesites .
Si mis escritos te trajeron consuelo o reflexión, gracias por tu interés y tu tiempo.
Patricio Varsariah .
Abandona
tu comodidad, enfrenta tus miedos e inseguridades, y sólo así,
comenzarás a volar. Si sientes que la vida no tiene sentido, que los
problemas te están acabando, memoriza esta parábola.
“Un
pájaro que vivía resignado en un árbol podrido en medio del
pantano, se había acostumbrado a estar ahí, comía gusanos del
fango y se hallaba siempre sucio por el pestilente lodo. Sus alas
estaban inutilizadas por el peso de la mugre, hasta que cierto día
un gran ventarrón destruyó su guarida; el árbol podrido fue
tragado por el cieno y el se dio cuenta de que iba a morir.
En
un deseo repentino de salvarse, comenzó a aletear con fuerza para
emprender el vuelo, le costó mucho trabajo porque había olvidado
como volar, pero enfrento el dolor del entumecimiento hasta que logró
levantarse y cruzar el ancho cielo, llegando finalmente a un bosque
fértil y hermoso.”
Los problemas son como el ventarrón que
ha destruido tu guarida y te están obligando a elevar el vuelo o a
morir. Nunca es tarde. No importa lo que se haya vivido, no importan
los errores que se hayan cometido, no importa las oportunidades que
se hayan dejado pasar, no importa la edad, siempre estamos a tiempo
para decir BASTA,
para oír el llamado que tenemos de buscar la perfección, para
sacudirnos el cieno y volar
ALTO y muy lejos del
pantano.
Abandona la vía segura y cómoda. Lánzate a la ruta
incierta, llena de enigmas e inseguridades y hazlo
solitariamente.
No estarás solo.
Patricio Varsariah.