Muy engañoso es el corazón
Publicado por Patricio Varsariah el domingo, mayo 1, 2016

Es tan desconocido para nosotros nuestro propio corazón que casi siempre nos sorprende…….
Cuando llevamos bastante tiempo caminando y viendo el mismo horizonte tendemos a creer que no habrá más nada… se nos olvida que los horizontes se abren cada vez y cambian no solo para mal, sino también para bien…
Creemos que conocemos inclusive nuestro interior y todas sus aristas por dentro, y a veces ni eso conocemos… la ventana cerrada, ¿quién sabe que habrá cuando se abra?
El peligro de permanecer bajo el mismo esquema es ese, convencerse que no hay más nada…
Muy engañoso es el corazón, ¿quién lo conocerá?, cuan ciertas son estas palabras.
Estoy convencido que uno de los mayores errores que se comenten en la vida es pensar que sabemos cómo va a reaccionar nuestro corazón ante lo que nos sucede en la vida…
Una clave para saberlo son las puertas que dejamos abiertas, las ventanas, llamadas sueños, no digo expectativas, esas que se depositan en otros; me refiero más a aquello que serías capaz de hacer, las montañas que te atreverías a escalar o derribar… los mares que cruzarías nadando o que por encima te atreverías a volar… Las ideas con las que podrías bregar, lidiar o derribar… los sentimientos con los que podrías luchar, los odios que podrías contener o desechar, y ¿por qué no? , los amores que estarías dispuesto a dejar, soltar… y lo más interesante que ahora se me ocurre, dándole la vuelta , ¿a quién no le ha pasado que al dejar un amor, al soltarlo al viento y dejarlo ir, incluso al desecharlo y hasta despreciarlo, al ver lo lejos que iba en aquel horizonte donde todo se va empequeñeciendo, fue sintiendo al mismo tiempo como también ese amor se llevaba consigo una gran parte del corazón dejándolo solo, incompleto… son esas cosas que no se prevén… y que nos sorprenden tanto…
Ah la vida! a veces ni se sabe qué o a quién quiere el corazón. A veces ni se sabe que la mente busca aventuras locas, libertades diferentes; pero resulta que el corazón es tan feliz en una playa tranquila con olas calmadas trayendo en si el aroma de la brisa…
¿Quién sabe lo que hay a la vuelta de la esquina? No solo ante lo que se aproxima, desconocido, sino también es bueno agregar lo que creemos tener completamente medido…