La vida nos tira hacia atrás y hacia adelante; insiste en vivir ahora
Publicado por Patricio Varsariah el lunes, septiembre 19, 2022

La vida es corta y, a menudo, arroja obstáculos inesperados. Las cosas suelen tomar un giro inesperado cuando sientes que nada puede salir mal. Es fácil asumir que la vida es larga, predecible y segura y que el futuro siempre estará ahí para ti.
Estamos viviendo como si estuviéramos destinados a vivir para siempre; nuestra propia fragilidad nunca se nos ocurre; no nos damos cuenta de cuánto tiempo ya ha pasado, pero lo desperdiciamos como si tuviéramos un suministro completo y desbordante, aunque todo el tiempo ese mismo día que estamos dedicando a alguien o algo puede ser el último.
Vivir la vida al máximo debería ser nuestra meta diaria, pero nos quedamos cortos y desperdiciamos nuestro tiempo finito preocupándonos por el pasado que no podemos cambiar y el futuro que no podemos controlar. Es imperativo aprovechar las oportunidades todos los días para vivir tu mejor vida.
La vida es larga si sabemos cómo usarla..
Todo el mundo teme el final de su vida. Pero la idea de que nuestra existencia llegue a su fin es algo en lo que nadie quiere pensar. Así que no lo hacemos. Sin embargo, sigue siendo una de las preguntas más críticas que debemos hacernos para vivir vidas intencionales: ¿cómo paso mi corta vida con poco o ningún arrepentimiento? Reflexionar sobre su mortalidad puede ayudarlo a asumir una vida más consciente.
Pienso que estar completamente vivo significaba reconocer nuestra propia mortalidad y vivir conscientemente como si no estuviéramos aquí mañana.
El secreto de una vida plena es vivir y relacionarse con los demás como si no estuvieran mañana, como si no estuvieras mañana. Elimina el vicio de la procrastinación, el pecado de la postergación, las comunicaciones fallidas, las comuniones fallidas. Este pensamiento me ha hecho estar cada vez más atento a todos los encuentros, encuentros, presentaciones, que pueden contener la semilla de la profundidad que puede ser descuidadamente pasada por alto.
Cuando realmente aceptas la idea de que “quizás no estés aquí mañana”, se abre un nuevo mundo de oportunidades. Te obliga a reevaluar lo que es importante y te da una sensación de urgencia para aprovechar al máximo cada momento.
Vivir como si no estuviéramos aquí mañana significa asegurarnos de no dejar remordimientos cuando nos vayamos de este mundo. Significa aprovechar al máximo cada oportunidad que la vida nos brinda y apreciar a las personas en nuestras vidas en este momento. También significa reconocer que la vida no es lineal y que nuestro sentido del yo es fluido y evoluciona a medida que maduramos.
La relación más importante en tu vida es contigo mismo. Si eres feliz y pleno, esto se reflejará en todas tus relaciones. Si eres infeliz, se notará en tus relaciones. La vida es un eterno desafío; debemos hacer continuamente nuevos y emocionantes comienzos
No crecemos absolutamente, cronológicamente. A veces crecemos en una dimensión y no en otra; de manera desigual Crecemos parcialmente. Somos relativos. Somos maduros en un ámbito, infantiles en otro. El pasado, el presente y el futuro se mezclan y nos empujan hacia atrás, hacia adelante o nos fijan en el presente.
Cada momento cuenta cuando vives como si no estuvieras aquí mañana. Los detalles se vuelven más importantes. Cuida más cómo pasa su tiempo, con quien comparte tus experiencias y las cosas más importantes para ti.
Cuando reconoces que la vida es corta e impredecible, defines tu propio significado en la vida. No hay un gran significado cósmico para todos; sólo existe el sentido que le damos cada uno a nuestra vida, un sentido individual, una trama individual, como una novela individual, un libro para cada persona.
Cuando estás viviendo profundamente, no tienes miedo de tu mortalidad. No tienes miedo de morir porque cuando vives plenamente, sabes que hay más en la vida que solo estar vivo. Miras el mundo con nuevos ojos y lo ves por lo que realmente es: un hermoso y fugaz momento en el tiempo.
Cuando vives una vida superficial, tienes mucho que temer. Tienes miedo de soltarte y enamorarte porque eso significa que podrías lastimarte. Tienes miedo de correr riesgos porque eso podría llevarte al fracaso.
Tienes miedo de ver el mundo como realmente es porque eso te mostrará que tu estado actual no es lo suficientemente bueno. Y, sobre todo, tienes miedo a la muerte, quizás el riesgo final y más aterrador.
Cuando vives auténticamente, dejarás un impacto duradero en quienes te rodean porque pueden ver que te preocupas por ellos. Y cuando saben que te preocupas por ellos, es más probable que también se preocupen por ti.
El secreto de una vida plena es vivir como si no pudieras estar allí mañana. Esta simple idea abre un mundo de posibilidades en tu vida porque significa que todo lo que haces cuenta y todo lo que dices importa.
Empiezas a actuar como si todas tus acciones tuvieran consecuencias, de modo que cada elección que haces tiene un efecto dominó en las personas que te rodean. Y esta mentalidad resulta increíblemente poderosa porque te obliga a asumir la responsabilidad por los resultados de tus acciones.
Cuando estás vivo, la vida es una oportunidad. Cuando estás viviendo, es un desafío. Y cuando estás viviendo profundamente, es una fuente de fortaleza.
Una vez que entendemos y aceptamos la inevitabilidad de la muerte, la vida vuelve a ser hermosa. Lo que importa no es cuánto tiempo vivimos, sino qué tan bien y qué tan profundamente vivimos hasta ese momento.
Gracias por tu generosidad y la paciencia de leerme, espero que hayas encontrado algo útil y si deseas puedes compartirlo ya que el saber aumenta si se comparte.
Saludos.
Patricio Varsariah.