la vida es una prueba que hay que superar..
Publicado por Patricio Varsariah el miércoles, abril 26, 2017
En algún lugar leí que "No se puede nunca predecir de dónde viene el viento, pero siempre deberíamos dejar las ventanas abiertas”. Es cierto, la vida es puro movimiento. Supongo que en eso consiste, en un ir y venir. Moverse continuamente. Un abrir y cerrar de puertas constante. Nuevas pruebas que superar y siempre, siempre hay que seguir adelante. Hoy ha sido un día bastante denso y en los dos últimos días me han pasado cosas más bien tirando a malas, que supongo demuestran que la vida es una prueba que hay que superar, lamer las heridas, siempre mirar hacia el futuro y seguir avanzando.
Llevo unos días muy enredado, triste y preocupado. Por muchos motivos, unos más importantes que otros. Hoy, por ejemplo, por un lado no me apetecía mucho escribir y sin embargo lo necesitaba, por otro lado, quería alejarme de aquí y simplemente no lo he hecho. Así que, como la contradicción parece ser uno de mis rasgos predominantes en estos días, pues hago como que no escribo o escribo algunas líneas que en principio parece que no significan nada, pero que en estos momentos significan mucho, y en este ir y venir estoy sacando una entrada de la manga. Las contradicciones pueden conciliarse. Sólo las mediocridades y las medias verdades son imposibles de conciliar.
Estas última semana han sido realmente muy significativas e importantes para mí desde el punto de vista de la salud. Pero también han sucedido otras cosas que me han marcado sobremanera, y necesitaba cierta distancia para poder sobreponerme y también algún tiempo para digerirlos. A veces pienso que nada en esta vida llega por azar. Las cosas suceden porque tienen que suceder. Tal vez todo este enredo es para que me dé cuenta y sea más consciente de que todo es relativo, que casi nada es importante y que la vida debe seguir a pesar de todo. Pero sobre todo hay que disfrutarla y vivirla a tope, y al momento.
En muchas ocasiones en el pasado en que asistía a reuniones de amigos y compañeros de trabajo, algunas personas dicen que soy raro, hace unos días alguien me lo volvió a decir, yo lo desmentí afirmando que soy lo más normal del mundo, pero después pensé que tal vez tenía razón, porque conozco un montón de gente, converso, me río, y aún así, muchas veces me siento fuera de lugar. No sé… como si en la vida todos no fuéramos más que simples actores… Como si hubiera que andar por el mundo justificando la propia existencia, mostrando lo que suma y ocultando lo que resta ¿a riesgo de qué?
Es increíble cómo en cuestión de minutos nuestra vida puede dar un giro completo. El azar puede determinar y hacer bascular nuestras vidas en un segundo, dependiendo si la pelota queda a un lado o al otro de la red. ¡Da miedo, pero es así!. El partido de futbol del domingo pasado entre Barcelona y Real Madrid.
Ayer tuve un día que hizo que me replanteara muchas cosas. Durante un par de días he visto todo negro. Evidentemente nunca todo es tan drástico, y el agua vuelve a su cauce, a veces incluso antes de que nos demos cuenta. Supongo que son rachas, por las que hay que pasar de vez en cuando, y de las que se aprende mucho. De todas formas, ahora sólo espero que en los próximos días llegue a sanar y estar bien para trabajar y para ir olvidándome gradualmente de estos días horribles.
Tenía muchas cosas que contar hoy, pero, por miles de razones, no podría escribir ni siquiera un par de frases con cierto sentido (de hecho no sé si han entendido algo de lo que he escrito). Espero poder estar más en forma mañana y reflexionar un poco sobre lo que ha pasado en los últimos días (aunque mejor no). Hoy estoy agotado y triste. Creo que los problemas de la salud y el no dormir me están afectando.Todos dependemos del azar y de las coincidencias, y definitivamente ya está bien de ser tan responsable y dar tanta importancia a las cosas. Las cosas y la gente pasan por nuestra vida porque sí. Lo bueno queda, y lo que no merece la pena pasa por nuestro lado sin dejar huella. Realmente todo da lo mismo, no podemos controlarlo todo; y debemos aprender de ello.