la muerte es el límite máximo
Publicado por Patricio Varsariah el lunes, junio 25, 2018

Hace 21 días que mi Madre viajo al Reino de la Paz,en estos días que han pasado he visto cómo mi dolor me permite prestar atención y comprender el poder del acto de dejar ir. Vadeando el dolor y el luto, al principio simplemente no pude enfrentar la realidad de la situación, ya que perder a mi Madre es increíblemente difícil, y creo que me llevara meses reunirme y reconocer realmente lo que ha sucedido.
Pero todos sus hijos y familia un día de estos debemos dar un paso atrás para apreciar todo el tiempo que llegamos a pasar con ella, para reconocer los grandes recuerdos y la fortuna de haberla tenido como nuestra Madre.
Me doy cuenta de que su ausencia es algo que no puedo controlar, y que pensar que de alguna manera podía controlarlo es una idea que me atrapara si sigo aferrándome. Pero una vez que deje de desear poder de alguna manera recuperarla, podre encontrar formas de honrar los recuerdos de mi Madre y ayudarla a seguir viviendo en mi corazón.
En última instancia, creo que, aunque la muerte es un final, también es una parte necesaria de la vida. Y aunque los finales como estos son desagradables, también son necesarios para la belleza; de lo contrario, es imposible apreciar a alguien, porque son ilimitados. Los límites iluminan la belleza, y la muerte es el límite máximo, un recordatorio para ser conscientes de esta bella persona y apreciar esta hermosa cosa llamada vida.
La muerte también es un comienzo, porque si bien he perdido a alguien tan especial, este final, como la pérdida de cualquier situación de vida es un momento de reinvención.
Aunque profundamente triste, su muerte me obliga a reinventar mi vida, esta reinvención es una oportunidad de experimentar la belleza en formas y lugares nuevos e invisibles. Y finalmente, la muerte es una oportunidad para celebrar la vida de una persona, y para estar agradecido por la belleza que me mostró y de todas sus sabias enseñanzas.
Como seres humanos, a veces nos acostumbramos al peso de la pena y a como nos mantiene en su lugar. Por ejemplo, a menudo le digo a la gente: "Mi Madre morirá una y otra vez por el resto de mi vida, y estoy de acuerdo con eso; me mantiene más cerca de ella". Esta es mi forma sutil de recordar todo lo que el dolor no hace desaparecer, incluso cuando dejamos ir a una persona. Paso a paso, respiración por respiración, se convierte en parte de nosotros. Y puede convertirse en una parte saludable de nosotros también.
Aunque es posible que nunca deje de llorar por completo, simplemente porque nunca dejare de amar a los que he perdido, puedo apoyarme en mi amor por mi Madre y mi Padre en el presente. Puedo amarlos y emularlos viviendo con su magnificencia como mi inspiración diaria.
Un Saludo de lo profundo de mi corazón
Vuestro hermano.
Patricio