
Cuando una relacion termina, que pasa con todos esos años que invertiste,
son como los años que una semilla necesitó para hacer florecer tu árbol.
Nunca se pierde, siempre se crece.
No te fijes más en la semilla porque esa ya no está,
fíjate en las RAÍCES que esa semilla creó en ti.
(hay relaciones que no dejaron ninguna semilla,por nunca floreció )