.. La vida en la vida
Publicado por Patricio Varsariah el miércoles, septiembre 9, 2015

Es tan grande el placer que se experimenta al encontrar un hombre agradecido, que vale la pena arriesgarse a no ser un ingrato..Existen días mejor y peores, todos lo sabemos. Existen momentos o etapas en las que no encontramos un rumbo claro, tenemos demasiadas dudas o estamos emocionalmente inactivos o decepcionados. Ante eso, puede que busquemos grandes soluciones en busca de la felicidad o el equilibrio personal. Parece demostrado que para llegar a ella, la clave es reunir un conjunto de elementos en nuestro mundo interior y entorno. No es un camino fácil. La felicidad, hay que trabajarla. Una manera de comenzar o continuar por el sendero que tal vez hayamos iniciado ya puede ser a través de un ingrediente muy útil y muy gratificante del que a veces nos olvidamos: La gratitud.
Cuando en un segundo la vida te cambia para el resto de ellos, y sin siquiera pensarlo, simplemente sigues en ella, dentro de ella, envuelta en ella, y le pides que te arrope aún más, para sentir el calor de un repentino invierno que duró un instante , para que el sol vuelva a salir de entre las nubes del desconcierto, del miedo, y del desconocimiento… cuando en un segundo el mundo cambió de revolución y giro…
La vida sabe más que todos nosotros, y quien sabe el propósito o los planes que tenga detrás de cada acto, y cada paso que se acoplan a nuestros senderos, bien sea de manera contínua, asentada, o al filo de la velocidad de la luz, de los pájaros que raudos surcan el cielo. La vida es un libro abierto en el que hemos insistido, de manera tozuda, en faltar a sus clases, en irlo cerrando, pero ella sabe lo que debe saberse y hacerse.
Un consejo, que será muy útil para quien quiera acoplarlo, un secreto susurrado: cuando la vida gire por donde no esperabas, no le des pie al desánimo, a volverte un mono que salta y salta, sin pausa, por la selva. Guarda toda tu energía en encaminarte con la mayor decisión y seguridad en el nuevo presente, que lo quieras o no ahí está. Nada importa lo que queramos o quisiéramos, ahí está, y sólo cabe hacerle sitio, acoplarlo y caminar bien derecho, con la sonrisa más amplia que podamos darnos a nosotros mismos…. Y para esos momentos, escasos, en que la sonrisa no nos sea posible sólo cabe intentar comprendernos, y fluir, estar con ello, e involucrarse en algo que pueda disipar esa perturbación.
Sonríe y para cuando no puedas, llora, pero no más que lo necesario, porque te hará falta toda la energía para el resto del camino, aspira el aire lento y profundo, siente tu cuerpo, tu respiración, y sobre todo siente que estás vivo. Ama y déjate amar profunda e intensamente. Esas circunstancias de la vida que te conectan con estados emocionales de un amplio abanico y hay, también , un amplio discurso interior de reconciliación, apaciguamiento y de energía sobrenatural, pero sin hacer siquiera nada… de dónde sale? No lo sé, pero tampoco me importa ya; están ahí, y doy gracias al universo, a la vida, a la nada y al todo, al mismo centro de dónde proviene…. La vida en la vida, que se manifiesta, se transmuta, cambia, evoluciona….
La impermanencia pura y dura, un curso avanzado en la asignatura más maravillosa de todas: LA VIDA.
La impermanencia pura y dura, un curso avanzado en la asignatura más maravillosa de todas: LA VIDA.